La aldea de Konoha fue finalmente reconstruida después de haber sido destruida por Pain. Sin embargo, en esa época, Naruto habría dado cualquier cosa por restaurar su casa destruida y dar a los demás aldeanos un lugar donde vivir. Lo que quedó fue un cráter, y Naruto acudió a Shenron en busca de ayuda.
De un solo golpe, Shenron podría devolver a la aldea de Konoha todo su esplendor de antaño, y eso no sólo permitiría a cada uno recuperar su casa, sino también prepararse para futuras amenazas, como la de Obito Uchiwa.